¿Sabías que en este mismo instante, mientras lee, está temblando en algún lugar del mundo o de Cuba, y que los temblores son eventos naturales que actúan sin previo aviso, y en eso radica precisamente su poder destructor? Así lo asegura el Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas (Cenais) en su sitio web (http://www.cenais.cu/cenais/).
Donde se explica que los terremotos son muestra de lo dinámico y cambiante que resulta el planeta Tierra. De ellos —asegura el CENAIS— obtenemos beneficios y pérdidas, y, desafortunadamente, no podemos hacer nada para detenerlos, aunque sí contribuir a aminorar los daños dada su magnitud.
Publicaciones encontradas en Internet plantean que los sismos pueden producir manantiales y presas naturales útiles para conservar o conducir agua, petróleo y gas. Además, exponen valiosos recursos minerales, incluyendo metales preciosos, y hasta reducen el riesgo de futuros terremotos, porque se supone que una serie de pequeños e inofensivos temblores liberan la energía que podría provocar uno más grande y devastador.
En cuanto a las afectaciones que generan, la incidencia de estos eventos naturales han obligado al desarrollo de procedimientos y tácticas de protección por expertos en prevención sísmica, para disminuir los daños y prevenir mayores consecuencias.
Al respecto, el Cenais, desde su fundación el 3 de febrero de 1992 en la oriental provincia de Santiago de Cuba, ha constituido baluarte en los estudios acerca de los temblores de tierra en la Mayor de las Antillas y en el conocimiento de las autoridades y la población para la mitigación de sus efectos.
La nueva zonificación sísmica de Cuba, estimación de daños y rehabilitación de estructuras esenciales, y los estudios de peligros, vulnerabilidad y riesgos en la región suroriental y la evaluación de peligros de deslizamientos y licuefacción de suelos, inducidos por la actividad sísmica, se encuentran entre las investigaciones de notable repercusión desarrolladas por sus especialistas.
Algunos de los objetivos específicos de la actividad del centro, radican en monitorear y evaluar la actividad sísmica en el archipiélago cubano, así como dirigir y operar las redes de estaciones del Sistema del Servicio Sismológico Nacional como encargo estatal.
También participar conjuntamente con las instituciones autorizadas en los Estudios de Impacto Ambiental, relacionados con el uso de suelos, ordenamiento territorial y política de inversiones.
Otras tareas radican en participar, conjuntamente, con instituciones nacionales y extranjeras en estudios geodinámicos, geológicos y geofísicos vinculados a las investigaciones sismológicas, y en colaboración con el ministerio de la Construcción del país elaborar y perfeccionar las Normas de Diseño Sismorresistente.
Cómo actuar ante un terremoto
Recuerde que un sismo puede ocurrir en cualquier instante y lugar, por eso, expertos en el tema aconsejan elaborar un plan de contingencia, previamente, con sus familiares o vecinos, el cual permita precisar las acciones a realizar por cada integrante de la familia o comunidad.
En caso de sentir temblar el suelo bajos sus pies reaccione con serenidad y tranquilice a las personas que estén a su lado. Si está bajo techo protéjase debajo de una mesa, escritorio, pupitre o cama resistente, y si no hay muebles, ubíquese debajo de una viga, al lado de una columna o en una esquina de la edificación en posición fetal. Se recomienda alejarse de ventanas, espejos o puertas de vidrios.
De encontrarte en un lugar muy concurrido (cine, teatro…), no se desespere ni corra hacia las puertas, ya que muchas personas se harán daño al tratar de salir al mismo tiempo.
Y si está en la playa, salga del agua rápidamente, retírese de la orilla y sitúese en un sitio elevado, a una distancia de al menos 300 metros, pues pudieran ocurrir grandes marejadas.
Las personas con limitaciones físicas motoras, que emplean una silla de ruedas, de estar en un local con techo deben situarse debajo de una viga, al lado de una columna o en una esquina, aplicar los frenos y cubrirse la cabeza con los brazos.
Una vez concluido el temblor, se tienen que desalojar con prontitud y en orden a las personas de las escuela, casa, o lugar de trabajo; utilizar las escaleras; procurar no caminar descalzo; encender la radio para escuchar las recomendaciones de las autoridades y acatarlas; y colaborar en el rescate de los heridos.
Ante la situación de quedar atrapado, mantenga la calma. Pida ayuda en voz alta o utilice algún objeto para hacer ruido. Esté preparado para los sismos secundarios conocidos como réplicas.