Había que acercar la informática al sistema nacional de enseñanza. Valerse de las tantas herramientas que internet puede ofrecer para un mejor aprendizaje. Se carecía de muchos conocimientos al respecto, pero quienes se dedicaban entonces a la cinematografía educativa sabían que era imprescindible ir dando pasos hacia esas prácticas.
Así surge el 28 de enero de 2009 el portal CubaEduca (www.cubaeduca.cu). Nace como un repositorio de información, donde se colocaban materiales sobre las diversas asignaturas y programas de estudio de los distintos niveles de enseñanza. Sin embargo, con el tiempo y sin esperar a tener mayores recursos informáticos, fue ampliando sus prestaciones y hoy es una multiplataforma con seis servicios en línea.
«Muchas cosas han cambiado desde entonces», recuerda la máster en Ciencias Stalina Prado Santisteban, líder del servicio repasador virtual. «Entonces éramos un grupo de profesores que nos habíamos entrenado para hablar a la cámara en las teleclases, pero que no teníamos conocimientos para conformar una plataforma de este tipo.
«Nos asesoramos con especialistas y aprendimos trabajando y atemperado las clases a los deseos de nuestros alumnos, que son nativos digitales. Buscamos información sobre plataformas similares en la región, Argentina y Colombia, entre otros países. Así se creó CubaEduca en la Empresa del Ministerio de Educación (Mined) de Cinematografía Educativa, hoy Empresa de Informática y Medios Audiovisuales (Cinesoft).
«Tenía tres momentos: estudiantes, maestros y familia. Hoy es una multiplataforma, con una retroalimentación constante, sobre todo de la familia de nuestros alumnos, que de alguna manera siempre nos ha acompañado con sus sugerencias y críticas», subrayó.
Un antes y un después
«Luego de la pandemia muchas cosas han cambiado, no solo en Cuba, sino en la mayoría de los países. Un sector impactado directamente fue el educacional. Y en esas nuevas maneras de enseñar, que ya se venían aplicando, la COVID-19 obligó a buscar fórmulas para lograr la interacción alumno-profesor y familia-escuela», expresó el Doctor en Ciencias Yosdey Dávila Valdés, director de producción y servicios telemáticos de Cinesoft y coordinador general de CubaEduca.
«Cuando tuvimos que convertir las casas en aulas y la familia paso a ser facilitadora en el proceso de aprendizaje, la teleclase se convirtió en el método más popular, pero CubaEduca estaba también allí, con un repositorio de las teleclases y el repasador virtual.
«Es también un problema cultural. Aunque pensemos que la mayoría se conecta a internet, y que nuestros alumnos son nativos digitales, es cierto que todavía no se accede todo lo que se debiera a nuestras ofertas», argumentó.
—¿Cuántas escuelas están conectadas a internet y cuánto cuesta la conexión a CubaEduca?
—Solo un 40 por ciento de nuestras escuelas tienen conexión, pero en todas hay, al menos, una computadora. Allí se puede ir a buscar nuestros servicios, pues aun a los lugares más lejanos se llevan en diversos portables. En las direcciones municipales de Educación los descargan de la nube y las escuelas tienen acceso. Por ejemplo, las visitas virtuales no están todas en el portal, las vamos alternando, pero están en las escuelas para que los docentes las utilicen y nos envíen sus experiencias.
«En cuanto al precio, es totalmente gratuito desde marzo de 2020, mediante un acuerdo entre Etecsa y el Mined».
«Nosotros colocamos los videos de las teleclases en streaming, lo cual permite descargar en diversos formatos y la persona elige el que sea más asequible al tipo de equipo que posea. También el repasador virtual se convirtió en una herramienta fundamental», explicó.
«El estudiante hace su pregunta y se le responde; no es que se le dé la respuesta a la tarea, sino que se le enseña el método para conseguirla, se le refiere bibliografía, otros libros donde pueda encontrar más información. Enseña a estudiar», acotó Stalina, quien forma parte, como especialista en Química.
«Un equipo de profesores, incluso docentes jubilados de una larga trayectoria y abundantes conocimientos, responden estas inquietudes en un corto lapso», explicó.
«El sistema nacional de educación está en perfeccionamiento, pero todavía muchos de los textos que tienen los alumnos son de los años 70 u 80. Nosotros indicamos otras bibliografías y materiales audiovisuales para que amplíen y actualicen conocimientos».
Al respecto añadió Yosdey que en alianza con la editorial Pueblo y Educación colocaron en CubaEduca durante la pandemia los textos de los programas de estudio de las diversas asignaturas, pues podía ser que algún alumno no contara con el libro en casa.
«También, y debido al confinamiento, decidimos poner materiales como visitas virtuales y otros de entretenimiento que sirvieran para ampliar conocimientos, pero también para entretener», destacó.
CubaEduca ha incorporado además otros servicios, como el comercio electrónico, «pues si alguien quiere comprar algunas de las ofertas de la multiplataforma puede hacerlo, a precios módicos, aunque en la escuela estén de manera gratuita.
«Muchos de nuestros profesores forman parte de las comisiones por asignaturas del 3er. Perfeccionamiento del sistema nacional de educación. Aprovechando esos conocimientos hicimos la primera jornada de capacitación La escuela después de… en la cual tuvimos una matrícula de 5 100 profesores, no solo de la Educación General, sino también de la Educación Superior y otros profesionales interesados en el tema.
Luego le dimos continuidad con otros cursos para preparar a los maestros en la manera de elaborar un guión didáctico, un software educativo. Nuestra meta es lograr que CubaEduca sea un espacio más colaborativo y que los maestros, no solo los que trabajan con nosotros, puedan enviar sus experiencias pedagógicas y colocarlas en la plataforma.
Además están los blogs de docentes especializados, con materiales de alto valor pedagógico y didáctico.
Otro logro de CubaEduca, señaló Yosdey, es que si bien comenzaron con materiales referidos a las diversas asignaturas de las educaciones primaria, secundaria básica y preuniversitaria, ya han incorporado los referidos a la Educación Especial y la Primera Infancia, así como también de la Educación Técnica Profesional, «que es la más compleja porque es muy amplia, pero hemos comenzado por las especialidades con mayores matrículas».
Futuro y otros retos
«La educación no puede ser la misma que era en el año 2020. Aunque ya se venía investigando y demostrando desde la práctica, ahora se entiende mucho más la necesidad de este proceso. Es preciso entonces que el maestro en el aula, que es insustituible, utilice estas nuevas maneras de enseñar, que lo acompañen para que la clase sea más atractiva para los estudiantes», subrayó Stalina.
Por su parte, Yosdey acota que entre los proyectos está que ese alumno «escapado», a quien sus compañeros buscan cuando tienen una duda para saber cómo le dio el resultado de un ejercicio, se pueda trasladar a las redes. «Y no por la ropa que lleva, o el peinado que se hizo, sino explicando una asignatura desde las diferentes posibilidades que da internet y se convierta en un estudiante líder. Ese es un desafío que queremos lograr, enfatizó.
«El 4 de abril de 2021 reinauguramos la multiplataforma con seis servicios. Para esa fecha queremos abrir este año una radio educativa y en nuestros planes también se proyecta hacer dibujos animados con algunas temáticas históricas.
«Debo destacar que, si bien CubaEduca es el corazón de nuestra empresa no remunera todo lo que podría presumirse. Es nuestro bien social, el mayor compromiso y el rostro de Cuba hacia el mundo en materia educacional».
Tomado de Juventud Rebelde