En representación del ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, hasta la provincia más afectada por el huracán Ian, llegan fuerzas de apoyo al saneamiento
Representantes de diferentes instituciones del ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) de Cuba se han sumado a las acciones de manejo, saneamiento y recuperación de los daños ocasionados por el huracán Ian en Pinar del Río.
Según han dado a conocer en sus perfiles de la red social Facebook, en el saneamiento del Jardín Botánico del Centro de Estudios Ambientales ECOVIDA de la más occidental de las provincias cubanas participaron los directores provinciales y económicos del sistema de la Agencia de Medio Ambiente (AMA).
A las acciones solidarias de ayuda se incorporaron igualmente los directivos de los Centros de Estudios Ambientales del país y el Centro de Investigaciones de Bioalimentos (Ciba), de Ciego de Ávila.
“La solidaridad llegó a la más occidental de las provincias cubanas en un cálido encuentro que evidenció la hermandad entre todas las instituciones ambientales del país”, destacó uno de los mensajes en las redes.
Otro post señaló que los directivos de los Centros de Estudios Ambientales del país y de la Agencia de Medio Ambiente representaban al resto de las instituciones del sector “allá donde la ayuda y la hermandad son más necesarias”.
A la par de las labores de recogida de desechos generados por la caída de árboles y ramas en Ecovida, las entidades del Citma hicieron entrega a ese centro de un donativo, a partir de las entregas voluntarias realizadas por especialistas, trabajadores y personal diverso del organismo rector de la política para la ciencia, la tecnología, la innovación y el medio ambiente del país.
El huracán Ian ocasionó daños en los tres ecosistemas principales del Parque Nacional Viñales según su director, Mario Sánchez.
Apreciaciones preliminares revelan que el ciclón de categoría tres en la escala Saffir-Simpson de cinco provocó perjuicios en el complejo de vegetación asociado a los mogotes, típicas elevaciones de la zona con cimas redondas.
Igualmente, perjudicó los tres niveles de bosque, derribó árboles, causó obstrucción en las dolinas que evacúan las aguas, a lo que se sumaron deslizamientos de tierra y roca, en tanto, la fauna sufrió igualmente los embates del fenómeno atmosférico, sobre todo las poblaciones de aves, reptiles e insectos, precisó.
De manera general, en Pinar del Río se estima que unas 85 852 viviendas resultaron dañadas de forma total o parcial en techos y estructuras, unido a las severas afectaciones, sobre todo en el sistema eléctrico, aun a cerca de un 30 por ciento de recuperación, a casi 15 días del meteoro.
Datos del ministerio de la Construcción indican que de todas las viviendas afectadas en el occidente del país, en el 78 por ciento los perjuicios son por la pérdida total o parcial de techos, una situación compleja para sus habitantes, pero que puede resolverse con rapidez.