Hacer que los resultados de las investigaciones de las universidades, la innovación, la ciencia y la tecnología tengan un impacto real, efectivo y emancipador en el desarrollo del país y contribuyan a la solución de problemáticas económicas y sociales ha constituido una preocupación de investigadores y académicos.
Con la creación de sociedades de interfaz, que tuvo un impulso durante 2022, Cuba apuesta por formas dinamizadoras para introducir los resultados de la ciencia, la tecnología y la innovación en el sector productivo y de servicios, priorizando los sectores estratégicos para el desarrollo económico y social del país.
Con su constitución en varias universidades del país, se trata de aportar desde el conocimiento de estas casas de altos estudios al sistema de gestión de gobierno basado en la ciencia y la innovación e incrementar su contribución al desarrollo económico, social y medioambiental, mediante la integración entre sus componentes y los requerimientos de la sociedad.
Hace más de dos años se creó la Sociedad de Interfaz de Ciencia y Tecnología de la Universidad Central Marta Abreu de las Villas, (SICTE S.A), que firmó su primer contrato el 8 de octubre del 2020. Desde entonces, la entidad ha acompañado, tanto a los gobiernos municipales como al provincial, en las transformaciones dentro de renglones estratégicos de la sociedad cubana (agricultura, empresas agroindustriales azucareras y políticas públicas).
SICTE S.A. se ha ampliado y llegado a firmar contratos con pequeñas y medianas empresas, privadas y estatales e, incluso, con trabajadores por cuenta propia y continúa su trabajo de interfaz creciendo en la contratación de proyectos de innovación, elevando el vínculo universidad -empresa con soluciones novedosas a problemas presente en la producción.
Como parte de su expansión, SICTE S.A. ha logrado firmar seis contratos de exportación de servicios con cuatro países de América Latina y África.
Según declaró a la prensa en 2022 el doctor en Ciencias Gilberto Quevedo Sotolongo, presidente de Sicte S.A., los resultados de la empresa de interfaz villaclareña, aliada en este empeño a la Universidad Tecnológica de La Habana (Cujae), han sido posibles por contar con un capital humano muy calificado y con resultados científicos que anteriormente no podían aplicarse con la inmediatez requerida, y que ahora, con la Sociedad Interfaz, pueden concretarse de manera rápida, mediante el proceso de innovación y/o transferencia de tecnología.
En agosto de 2020 se creó la Sociedad de Interfaz de Ciencia y Tecnología de la Universidad Tecnológica de La Habana José Antonio Echeverría (CETA S.A.), con el objetivo de fortalecer los vínculos entre la universidad cubana y el sector productivo y de servicios, que exhibe hoy resultados de la aplicación de la ciencia y la investigación que deben revertirse en las empresas, a través de la innovación y la transferencia de tecnologías y elevar su eficiencia y competitividad.
Los proyectos que se desarrollan en ese centro de altos estudios se relacionan con todas las áreas de la ingeniería, la arquitectura y otras especialidades y tributan a sectores estratégicos de la economía cubana como los de la construcción, electroenergético, telecomunicaciones y la informática, turismo, producción de alimentos, industria biotecnología y farmacéutica, y servicios técnico-profesionales.
En CETA existen dos clasificaciones para esos proyectos: los asociados a programas nacionales, sectoriales y territoriales, y los de transferencia e innovación, solicitados por el sector productivo y de servicios, que incluyen servicios científico-técnicos, consultorías y capacitación profesional.
Según declaraciones a la prensa de su directora, la doctora en Ciencias Danae Pigueiras Otero, la empresa se enfoca en generar un modelo de trabajo que funcione como un canal de transferencia e innovación en dos direcciones.
La primera se enfoca hacia los equipos de trabajo de la universidad, con apoyos en el diseño y gestión de los proyectos, el desarrollo de nuevos productos y servicios, la búsqueda de financiamiento y el perfeccionamiento de una cultura de la innovación que parte de la integración empresa-universidad, además de dirigir la investigación hacia problemas y requerimientos de la actividad económica.
Mientras, la segunda, hacia el sector productivo y de servicios, identificando y canalizando sus necesidades, facilitando la introducción de la ciencia y la transferencia de tecnologías en la solución de problemas, y asegurando asesoría y capacitación profesional que garanticen un cambio de mentalidad hacia la innovación.
Impulso de 2022
La Sociedad de Interfaz de Ciencia y Tecnología de la Universidad de Camagüey, UCETID S.A. Accionistas: Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz (80 %) y Universidad de Ciego de Ávila Máximo Gómez Báez (20 %), aprobada por el MEP el 26 de abril del 2022.
Esta sociedad mercantil contribuirá a la comercialización de productos académicos y de ciencia para la captación de divisas, indispensables en el actual escenario económico del país.
El plantel universitario camagüeyano, que conmemoró en noviembre pasado su aniversario 55, ofrece especial prioridad a los programas de ciencia que tributen directamente al avance de la empresa estatal socialista, en consonancia con la estrategia socioeconómica del gobierno cubano.
Más del 80 por ciento de los 104 proyectos de investigación, desarrollo e innovación que gestiona esa casa de altos estudios se encaminan hacia ese objetivo, mediante el fortalecimiento de vínculos con empresas dedicadas a la producción de alimentos, de energía, derivados del azúcar, entre otras ramas.
La cuarta Sociedad Interfaz de Ciencia y Tecnología que al amparo del Ministerio de Educación Superior (MES) se crea en el país, quedó oficializada el 13 de julio de 2022 en la Universidad de Oriente (UO) bajo el nombre de CINTRO S.A.
Se trata de una sociedad mercantil con capital cien por ciento cubano que busca reforzar los vínculos con el sector productivo y de servicios de sus instituciones accionistas: la Universidad de Oriente y la Universidad de Guantánamo, y concreta la política nacional de impulsar una gestión de gobierno basada en la ciencia y la innovación.
Al momento de su fundación, la presidenta de la Junta Directiva de CINTRO S.A, la Doctora Rosa María Reyes Bravo, explicó que la sociedad responde a los ejes y sectores estratégicos definidos en el Plan Nacional de desarrollo económico y social hasta el 2030, y aspira a impulsar el progreso y responder a las necesidades de las cinco provincias orientales.
Con el objeto social de gestionar proyectos de investigación, desarrollo e innovación, la transferencia de tecnologías, la realización de consultorías, asesorías y la comercialización de otros intangibles, CINTRO S.A sumará sus esfuerzos a los de entidades similares existentes en la Universidad Tecnológica de La Habana (Cujae), la Universidad Central de las Villas Marta Abreu y la Universidad de Mayabeque.
La Sociedad Mercantil Empresa de Ciencia y Tecnología de Interfaz de la Universidad de Holguín (EICT S.A.), que tiene como accionistas a la Universidad de Holguín (80%) y a la Universidad de Moa Dr. Antonio Núñez Jiménez (20%), aprobada el 28 de marzo del 2022 y constituida el 16 de septiembre del 2022, es la quinta de su tipo creada en nuestro país.
Durante su constitución, reflejaron entonces medios de prensa, Yorley Arbella Feliciano, presidente de la junta directiva general de la empresa, comentó que entre sus misiones está incrementar las exportaciones por concepto de servicios científicos técnicos y asistencia técnica fuera de fronteras y apuntó al alto compromiso con la dirección del país de ser una empresa rentable y de referencia en Cuba.