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Cuba calienta motores hacia economía circular

La economía circular: un modelo económico que lleva al crecimiento y al empleo sin comprometer el medio ambiente.

La implementación de la transición hacia la economía circular, la preparación de un estudio de percepción ambiental y las características y fines del proyecto de bojeo a Cuba, fueron analizados en el más reciente encuentro de la Secretaría Técnica del Macroprograma de Recursos Naturales y Medio Ambiente.

Presidido por la viceministra de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) Adianez Taboada y la directora de Medio Ambiente,  Odalys Goicochea, en el encuentro se destacó la necesidad de avanzar de manera coordinada e integrada hacia la economía circular (EC), tanto por la importancia que tiene ese enfoque para la economía del país, por el impacto en la sustitución de importaciones; como para el cuidado del medio ambiente, al reducirse y prevenirse la generación de desechos.

Al respecto, se expuso la estrategia, que tiene tres etapas, y se  revisó el plan de acción para acelerar la implementación, con medidas relacionadas con circulación de paquete informativos sobre EC capacitación, comunicación de iniciativas, creación de una Red sobre esta temática,  realización de encuentros de trabajo  con organismos prioritarios, entre ellos, los  ministerios de la Agricultura y de Industrias y el Grupo Empresarial Azcuba.

En el intercambio, se analizó la necesidad de compartir información para lograr avances significativos, generar confianza entre actores y establecer estrategias que les permitan conocerse mejor y conocer sus prácticas.

También se analizó la importancia de contar con un marco legal que favorezca la implementación de la EC, tanto mediante la actualización, por ejemplo, de las normativas sobre la recuperación de materias primas, como en las vinculadas con las nuevas formas de gestión, específicamente las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) y otras redes comerciales, que están realizando importaciones que generan gran cantidad desechos plásticos y envases de aluminio.

De igual modo, se analizó la necesidad de establecer indicadores concretos, que sean objetivos y que permitan medir avances en la implementación, un proceso que será a largo plazo y que demanda, ante todo, conocimiento de sus características, definiciones  y conceptos, que van mucho más allá del reciclaje, que es apenas uno de sus componentes. Sobre los indicadores, la viceministra señaló la importancia de que estos sean “cumplibles, pero retadores”.

Participantes en la reunión coincidieron en que para que la estrategia tenga expresión en la vida, debe ser asimilada en las empresas y  en los territorios, logrando coherencia entre lo macro y lo micro, que sea incorporado en las estrategias de desarrollo de los municipios. A su vez, se indicó, estos preceptos deben ser incorporados en los macroprogramas,  programas de ciencia e innovación y los diferentes proyectos.

Por otra parte, se llamó a considerar este tema en la elaboración de los planes de la economía de 2024 y tener en cuenta que la EC está incorporada de manera directa en el lineamiento no. 88 de la Política económica y social del país y de forma indirecta en otros 18 lineamientos, en aspectos que van desde el diseño hasta el consumo.

Según se informó, está temática tendrá un seguimiento permanente para medir avances en el cumplimiento del plan de acción, con el Citma aportando  desde lo metodológico.

Otras temáticas

En el caso del estudio de percepción sobre medio ambiente, se coincidió en la importancia de su realización y se hicieron sugerencias relacionadas con el empleo de las tecnologías de la información, tanto para la preparación metodológica como en el proceso de captación de la información.

Según la propuesta,  la investigación buscaría información acerca de un amplio diapasón de asuntos, desde qué se entiende por medioambiente, sus componentes, vulnerabilidades y riesgos hasta actitudes y motivación ambientales, ahorro de energía, cuidado del agua, reciclaje y ruido, entre otros.

El proyecto bojeo a Cuba, por su parte, tiene como objetivo general evaluar la condición y estado actual de los arrecifes de coral someros alrededor de toda la plataforma cubana.

Los fines específicos serían evaluar el estado de las aguas y la presencia de agentes estresantes ambientales en ellas, que puedan determinar la salud de los arrecifes; estudiar la biodiversidad, la salud, los procesos ecológicos, la estructura y el funcionamiento de los arrecifes coral.

A su vez, esta iniciativa liderada por la  Universidad de La Habana y propuesta para los meses de verano, persigue evaluar  el estado de las poblaciones/comunidades de depredadores grandes y megafauna en aguas oceánicas adyacentes y producir materiales divulgativos para diferentes medios y plataformas.

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