Naciones Unidas lanza un nuevo instrumento que permite medir la prosperidad económica y el bienestar humano incluyendo las aportaciones de la naturaleza, pensado para que los Gobiernos puedan integrar el medio ambiente en sus cálculos de crecimiento.
El Sistema de Contabilidad Ambiental y Económica Integrada mide al mismo tiempo la prosperidad económica, el bienestar humano y las aportaciones de la naturaleza.
¿Es posible integrar medio ambiente y economía? Cada vez más economistas y ambientalistas critican que la mayoría de los Gobiernos utilice tan solo el Producto Interior Bruto (PIB) como indicador del crecimiento de sus economías, ya que esta forma de medir no tiene en cuenta el coste que puede suponer la destrucción del medio ambiente. Y es que, en los últimos cincuenta años, el crecimiento económico del planeta se ha multiplicado casi por cinco, pero también se han acelerado de manera dramática el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. Por eso, para intentar solucionar esta desconexión entre la economía y el cuidado del planeta, Naciones Unidas ha lanzado una nueva herramienta que permite incluir el “valor real” de la naturaleza en las políticas y decisiones económicas.
El Sistema de Contabilidad Ambiental y Económica Integrada, que es el nombre que ha recibido este nuevo indicador, utiliza un marco estadístico diferente al del PIB que mide al mismo tiempo la prosperidad económica, el bienestar humano y las aportaciones de la naturaleza. Entre otras cosas, la herramienta añade a las cuestiones económicas clásicas, como la generación de empleo o el balance entre exportaciones e importaciones nuevas variables como la conservación del “capital natural” que suponen bosques, océanos y otros tipos de ecosistemas.
“Los recursos naturales no aparecen en los cálculos de riqueza de los países. El sistema actual se orienta en favor de su destrucción, no hacia su preservación“, ha afirmado António Guterres, secretario general de la ONU, durante la presentación de la herramienta. Para el veterano diplomático portugués, es imprescindible “transformar nuestra forma de ver y valorar la naturaleza” incluyendo su auténtico precio “en todas nuestras políticas, planes y sistemas económicos”, ya que si actuamos de este modo “la inversión podrá destinarse a actuaciones que sirvan para proteger y restablecer la naturaleza”.
Además, este modelo contable también sirve para lograr una mejor respuesta a las emergencias medioambientales, como el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. En cualquier caso, el nuevo marco se debatirá esta semana en la 52ª sesión de la Comisión de Estadística de la ONU, organizada por el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la Organización, que adoptará la medida, siempre y cuando no haya objeciones, en un plazo de 72 horas a partir del viernes 5 de marzo.
“Hemos tratado a la naturaleza como si fuera gratis y sin límites. Por tanto, la hemos degradado y usado sin ser plenamente conscientes de lo que hacíamos y de lo mucho perdíamos en el camino”, ha asegurado Elliott Harris, subsecretario general de Desarrollo Económico y Economista Jefe de la ONU. Para Harris, este nuevo marco “nos permitirá observar cómo las actividades económicas pueden afectar a nuestros ecosistemas, cómo nos afecta la presencia de la naturaleza y cómo podríamos cambiar nuestras actividades para alcanzar la prosperidad y sin dañar o destruir la naturaleza en el proceso”.
Creada en 1947, la Comisión de Estadística es el máximo órgano de decisión de la ONU de este tipo de registros en el ámbito internacional, se encarga de establecer normas estadísticas y desarrollar conceptos y métodos, incluida su aplicación a nivel nacional e internacional. La Comisión suele reunirse anualmente en marzo durante cuatro días y cuenta con la participación de los jefes de estadística de los Estados miembros de la ONU, expertos, responsables políticos y la sociedad civil. Eso sí, este año, debido a la pandemia de coronavirus, todos los encuentros serán telemáticos.
Fuente
https://www.elagoradiario.com/desarrollo-sostenible/onu-herramienta-medio-ambiente-economia/