Disímiles son los desafíos a los que deberá responder la ciencia cubana, en medio de un complejo contexto nacional e internacional. Ante esas circunstancias, el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) traza pautas para perfilar los derroteros del sistema de ciencia, tecnología e innovación del país, con la mirada puesta en la solución de problemáticas nacionales y locales.
Según destacó recientemente la ministra del Citma, Elba Rosa Pérez Montoya el país ha avanzado en su estrategia de transformación de la ciencia, la tecnología y la innovación, cuya expresión más concreta es el sistema de gestión de gobierno basado en ciencia e innovación.
Pérez Montoya recalcó que ese tema se mantendrá como prioridad durante 2023, junto a la innovación, que será un eje transversal para la actividad de ciencia en el país.
La ministra enfatizó en la necesidad del uso consciente de la ciencia para la solución de los problemas que enfrenta la nación. “No se trata de reiterar que hay un sistema de ciencia, un sistema de transformación de la gestión de ciencia y tecnología, sino usarlo de manera consciente” en asuntos como la producción de alimentos, la energía, con énfasis en las fuentes renovables.
“Es una necesidad de que el país siga avanzando, tenemos un compromiso de transformar un 24 por ciento la matriz energética nacional al 2030, pero tenemos que acelerar más ese programa”, destacó.
De acuerdo con la ministra, Cuba tiene que emplear más ciencia en los temas relacionados con la industria y la dinámica demográfica, a partir del procesos de envejecimiento y las estrategias que desarrolla el país para su atención.
Pérez Montoya destacó la prioridad que debe alcanzar la temática de la ruralidad, con propuestas al gobierno de su reevaluación y atención, y que se apoyará en 2023 desde la actividad científica.
En 2023, adelantó, se ampliará y presentará la estrategia cubana sobre la economía circular y las propuestas de los pasos que debe adoptar la nación para avanzar en este asunto, como una necesidad del país.
Acerca de la segunda etapa de la Tarea Vida, Plan de Estado para el enfrentamiento al cambio climático, la ministra recordó que la primera fase concluyó en 2022 y se avanza en la segunda de sus cuatro etapas: segunda etapa hasta el 2030; tercera, hasta 2050, y cuarta, en lo adelante.
“Todos los años actualizamos las investigaciones relacionadas con el Plan de Estado, los efectos del cambio climático cada día son más notorios y nuestro país es un pequeño estado insular, que también tiene los impactos en el cambio climático y estamos ahora desarrollando toda una serie de acciones de adaptación en todas las esferas del desarrollo de la nación”, dijo.
Según destacó, una prioridad relacionada con la Tarea Vida tiene que con las tres crisis ambientales globales que hoy existen en el país: la del cambio climático, la contaminación y la biodiversidad,
“Tenemos necesidad de profundizar en cómo vamos a seguir atendiendo a partir de este Plan de Estado con los temas relacionados con el cambio climático, sus efectos, cómo minimizar tus impactos”, apuntó.
A su vez, destacó como prioridad los temas de la contaminación hídrica, atmosférica y todas sus expresiones, así como la biodiversidad.
Para avanzar en los diferentes temas, el Citma ha identificado prioridades, entre ellas, el desarrollo de más ciencia apoyar las políticas públicas y la toma de decisiones, la atención a los recursos humanos dedicados a la actividad de investigación y el desarrollo, “imprescindible para avanzar en todo lo que hagamos”.
Durante 2023, será también prioritario ampliar las estructuras dinamizadoras de las entidades de ciencia, tecnología e innovación: parques tecnológicos. Según expresó, no se trata de tener más estructuras dinamizadoras por el número, “sino de más estructuras dinamizadoras para perfeccionar el trabajo de la ciencia en el país”.
Para Cuba, enfatizó, constituye relevante también seguir ampliando la participación de las ciencias sociales y humanísticas en el desarrollo de la nación. “No hay un tema que no se analice valorando su enfoque social, su connotación, traje a la medida en cada territorio, con cada una de las características, ahí tenemos una de las prioridades para esta etapa”.
“Nosotros necesitamos que nuestra ciencia tenga la salida y haga una expresión de cierre del ciclo donde tengamos más publicaciones y más patentes, y eso habla del avance y el crecimiento que pueden tener nuestros resultados de investigación cuando concluyen con una patente y eso tiene un impacto no solamente en el ámbito nacional, sino también en el ámbito internacional”, puntualizó.
Finalmente, abordó el tema de las inversiones para fortalecer los sistemas de gestión de ciencia e innovación, con prioridad en el sector empresarial, de manera que la empresa cubana estatal socialista avance más en la utilización de la ciencia y las inversiones que tienen que ver con este importante tema.