El año 2022 estuvo caracterizado en nuestro país por la ocurrencia de numerosos eventos meteorológicos y climáticos extremos, como sequías, inundaciones costeras, ciclones tropicales y varios periodos de intenso calor, registrándose los dos más importantes entre el 22 y el 28 de julio, y del 31 de julio al 4 de agosto.
Así trascendió durante la presentación del resultado Estado del Clima en Cuba 2022, que tuvo lugar en el VIII Congreso sobre Cambio Climático, uno de los nueve eventos que formaron parte del programa de la XIV Convención Internacional sobre Medio Ambiente y Desarrollo, recientemente concluido en la capital.
Según el informe elaborado por un colectivo de autores del Centro del Clima, el Centro de Agrometeorología, el Centro de Física de la Atmósfera y el Centro de Pronósticos, todos del Instituto de Meteorología, y del Instituto de Ciencias del Mar, el pasado año registró la tercera temperatura media anual más alta desde 1951, al superar el promedio histórico en 0,88 grados Celsius.
Incluso, el porciento de días cálidos estuvo entre los 11 más altos de los últimos 44 años en las estaciones meteorológicas tomadas como referencia, mientras el de noches calurosas ocupó igual posición para el periodo 1980-2022.
Vale destacar que la temperatura media anual de Cuba aumentó en un grado Celsius en la etapa 1951-2021 y la tendencia al incremento continúa.
Al exponer el informe, la doctora Cecilia María Fonseca Rivera, jefa del Centro del Clima, mencionó, asimismo, la notable inundación costera registrada a finales de septiembre en zonas bajas aledañas al golfo de Batabanó, asociada al azote del huracán Ian a las provincias de Pinar del Río y Artemisa, el día 27.
La entrada del mar en tierra superó los cuatro kilómetros como promedio en algunos tramos, pero en determinados puntos alcanzó una distancia mayor, recalcó la especialista.
También el archipiélago cubano fue afectado por una persistente sequía meteorológica en el trimestre octubre-diciembre de 2022, cuando esta se hizo presente en el 84 % del territorio nacional.
De manera significativa, la estación mareográfica de Siboney, al oeste de La Habana, midió la mayor elevación del nivel del mar observada jamás en ese lugar de monitoreo, dato que ratifica la tendencia al ascenso de esa variable a largo plazo en Cuba.
Según los resultados de las evaluaciones más recientes, el incremento del nivel del mar en nuestro entorno estaría en el orden de los 29, 3 centímetros para 2050 y en 95 cm en 2100, por encima de los 27 y 85 cm calculados anteriormente.
Tomado de Granma