Muy temprano en la necrópolis de Colón de La Habana, este 8 de enero se rindió tributo al científico francés André Voisin, a 121 años de su natalicio, el 7 de enero de 1903, en Dieppe, el sur de Francia, con la presencia del embajador de Francia en Cuba Laurent Burin Des Roziers, el viceministro del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), Armando Rodríguez Batista, y el presidente de Academia de Ciencias de Cuba, Luis Velázquez.
Al homenaje se sumaron representantes del Citma, la Academia de Ciencias de Cuba e investigadores cubanos, seguidores del pensamiento científico de Voisin.
“Hoy conmemoramos el 121 aniversario del nacimiento del Viajero de la Ciencia, fallecido el 21 de diciembre de 1964 en nuestra capital. En su fructífera vida, se destacan numerosos reconocimientos como ciudadano francés, científico internacional y conferencista en quince países, en una o varias ocasiones, durante su amplio periplo científico”, dijo el académico titular Raúl Ruiz, del Centro de Investigaciones para el Mejoramiento Animal de la Ganadería Tropical.
Ruiz destacó los ocho títulos trascendentales de la obra científica de Voisin, traducida a múltiples idiomas, así como sus viajes por el mundo, compartiendo sus conocimientos y hallazgos.
“En su último viaje por el mundo, primero a América Latina, lo sorprendió la muerte en pleno trabajo científico creador, donde le esperaban momentos felices y culminantes de su vida como científico y también el reposo definitivo. En esta trascendental visita, expresó su admiración por los valores sociales y humanos de la Revolución, donde un Jefe de Gobierno, acude de madrugada a recibir a un modesto científico francés, conocer y dirigir personalmente un experimento científico y agronómico”, recordó.
Voisin calificó al Comandante en Jefe Fidel Castro como su mejor alumno y expresó su deseo de que los líderes de todos los países, leyesen obras científicas durante varias horas al día, en favor de la buena
marcha de los asuntos de Estado.
Con respecto a Voisin, Fidel expresó su tránsito, con las dudas y enseñanzas recibidas de su obra, donde señaló: “A través de sus obras se puede apreciar, el hombre, en su salud y felicidad, como objetivo fundamental. En realidad el hombre y su felicidad, deben ser el objetivo esencial de todos los
revolucionarios”.
En su obra científica, apuntó Ruiz, existe una atención especial y extraordinario esfuerzo, al estudio de la utilización de los pastos por el ganado vacuno para la producción de leche. En este ámbito, son notables sus conceptos y las Leyes Universales del Pastoreo Racional, en contraposición a la rigidez del pastoreo
rotacional.
“En términos sociales el pensamiento científico de Voisin, está alineado con el mejoramiento del ser humano, hasta el más alto grado del desarrollo de su inteligencia”, dijo y se refiriço a los elementos de las relaciones SUELO-PLANTA-ANIMAL-HOMBRE, “minuciosamente analizadas con un criterio esencialmente científico y práctico”.
Para el académico, “la dialéctica del pensamiento científico de Voisin, reflejado en todas sus obras literarias conocidas, es sumamente coherente, profundo, visionario y adelantado a sus tiempos”.
En su intervención en el tributo, el embajador francés en Cuba, Laurent Burin Des Roziers agradeció a las autoridades presentes la invitación a participar en la ceremonia y calificó “de gran valor para nosotros el hecho de ver que André Voisin sigue ocupando un lugar especial en la memoria de los cubanos”.
Según dijo, Voisin demostró en varias ocasiones su valor y su entrega al bien común, por ejemplo, cunado como ciudadano y patriota francés, cuando se puso a disposición de la marina al declararse de la II Segunda Guerra Mundial y resultó herido en combate y luego en el esfuerzo de resistencia que dió lugar a la liberación de Francia, en 1945.
A su vez, dijo, demostró su dedicación al desarrollo de la sociedad como científico, promoviendo a través de sus trabajos una agricultura sostenible en un periodo en el que era usual defender el desarrollo de una cultura intensiva y cómo su literatura científica se convirtió 50 años después en material de referencia de ganaderos, universitarios y científicos a través del mundo, en Estados Unidos, América Latina, Canadá, Brasil, Argentina y por supuesto, Cuba.
Burin Des Roziers se refirió a proyectos desarrollados en el campo de la agricultura y del desarrollo sostenible, como parte de una intensa cooperación entre investigadores y científicos, franceses y cubanos, entre ellos, el proyecto FSPI (Fondo de Solidaridad para Proyectos Innovadores) AGROECOCARIBE, “es un ejemplo de ello, a través del apoyo a un grupo de investigadores franceses y cubanos que trabajan conjuntamente sobre la agricultura verde y sostenible”.
En 2024, adelantó, esperamos lanzar un nuevo proyecto comun FSPI para contribuir a la seguridad alimentaria y nutricional de la población cubana, con un enfoque de una sola salud para la producción sostenible de alimentos, mediante la implementación de prácticas agroecológicas en
Para el diplomático, Voisin “representa para nosotros un ejemplo de lo que puede y debe ser la cooperación entre nuestros dos países. Es además una figura que nos guía en la concepción de una agricultura respetuosa con el medio ambiente y de los ritmos de la naturaleza”.