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Informática con rostro joven

Manuel Darío y Alberto Leyva en pleno estudio. Autor: Cortesía de los entrevistados

Son muy jóvenes y ya sueñan el futuro desde hoy. No saben de días feriados u horarios específicos, cuando de estudio se trata. Manuel Darío Oliver Ballesteros y Alberto Leyva Guerra son estudiantes de duodécimo grado del Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas (IPVCE) Ernesto Guevara, de Villa Clara, y la alegría les desborda el rostro porque forman parte de la delegación cubana a la 34ta. edición de la Olimpiada Internacional de Informática que se efectuará del 7 al 15 de agosto en Indonesia. Esta Olimpiada es la más prestigiosa de su categoría, y participarán los mejores talentos mundiales que actualmente cursan la educación media.

Una vez que obtengan medallas podrán optar por una carrera universitaria, la que prefieran. Asimismo, cualquier universidad del mundo podrá otorgarle una especialidad.

Manuel Darío ha aprendido a controlar la tensión o el nervio en este tipo de certámenes y aunque es de pocas palabras accedió a este diálogo con JR: «Mi meta es obtener oro. No hubiera podido lograr este sueño sin el apoyo incondicional de mis padres y de los profesores. Quisiera estudiar Ciencias de la Computación (Cibernética)».

Manuel Darío prefiere el color rojo y es más bien de esos muchachos que les gusta pasar inadvertido, aspecto que casi es imposible por su talento que irradia luz hacia los demás.

«Soy un joven común y corriente. Mi computadora es muy especial por todo el tiempo que lleva conmigo. También disfruto estar en familia. Mi hermana cursa el 9no. grado en el Centro de Entrenamiento Provincial para alumnos de alto rendimiento académico, o sea en mi misma escuela, pero a ella le fascinan las Matemáticas».

Alberto Leyva Guerra es un muchacho risueño y enamorado que prefiere la perfección sin lastimar a los que lo rodean. «La preparación para esta
Olimpiada no es cosa de un año ni dos, ya que vengo preparándome desde octavo grado. Esta será mi tercera Olimpiada Internacional y la primera vez que asistiré presencialmente», enfatiza Leyva Guerra.

La preparación ha sido constante y en condiciones distintas, debido a la pandemia de la Covid-19. Nos cuenta Alberto: «Cambiamos la forma tradicional de preparación, y muchos de los ejercicios nos los enviaba por WhatsApp nuestro entrenador Francisco Hernández
González (Frank). Además, formé parte de la preselección nacional de Informática en el Centro Eduardo García Delgado en La Habana donde estuve un mes para prepararme.

«Allí fue intenso el estudio y aprendimos mucho del entrenador Leonardo Cardona Luque, que también integra la delegación cubana a esta Olimpiada, y mientras estemos en Indonesia, John Mauris López Ramos, de Villa Clara, y Ernesto David Serize Portela, de Cienfuegos, estarán compitiendo de forma online desde la Universidad Central «Marta Abreu» de Las Villas, en Santa Clara».

Alberto sueña en grande: «Mi objetivo es lograr mi primera medalla en este tipo de evento. Quisiera agradecer a toda mi familia y a las familias de mis compañeros que han hecho posible este logro, a mi entrenador Frank, y a un amigo en especial, Noelvys Marín Mora, que ha estado conmigo desde el principio y obviamente no puede faltar el agradecimiento a los profesores y al equipo en general del Centro de Entrenamiento Provincial para alumnos de alto rendimiento académico del IPVCE Ernesto Guevara de Villa Clara, concluyó.

Estos muchachos desde ya prometen un futuro prominente por su innato talento. Queda esperar la Olimpiada próxima para conocer qué les depara la Informática a Alberto Leyva y a Manuel Darío Oliver.

Tomado de Juventud Rebelde

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