Pistas y lecciones aprendidas para la comunicación y de trabajo en comunidades se compartieron en el I Taller de Infocomunicación del proyecto AdaptHabana. Ruta a la adaptación al cambio climático, con especialistas en comunicación de instituciones y municipios vinculados a esta iniciativa, enfocado en potenciar el conocimiento acerca del proyecto e impulsar la participación de instituciones y la ciudadanía.
El taller permitió socializar con actores clave a nivel territorial los principales enfoques y alternativas comunicacionales, proyectadas en el marco de implementación de la Estrategia de Infocomunicación del proyecto AdaptHabana y destacar la importancia de acciones de comunicación con enfoque de género, que resalten la identidad y diversidad cultural de los territorios, lo cual favorece el interés y estímulo a la participación ciudadana en su marco de intervención.
A su vez, posibilitó el intercambio personal y la creación de vínculos que propiciarían potenciar la importancia del Sistema de Gestión de la Información del proyecto AdaptHabana, en función de fomentar soluciones y formas de superación que beneficien a todas las partes interesadas.
El programa incluyó presentaciones sobre diversos aspectos relacionados con la comunicación, entre ellas, Principales enfoques para trabajo en comunidades. Enfoque de género e inclusión social, a cargo de Tamara Roselló, Oficial de Comunicación UNICEF-Cuba; Comunicación y Sociedad. ¿Y ahora hacia dónde vamos…?, de la doctora en Ciencias María Aurora Soto Balbón, presidenta de la Sociedad Cubana de Ciencias de la Información.
En la mesa interactiva Lecciones aprendidas desarrolladas por otras iniciativas en curso, se dieron pistas esenciales para la comunicación. La máster en Ciencias Selmira Perdomo Sierra, del proyecto Resiliencia Costera, de la Agencia de Medio Ambiente (AMA), del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) se refirió a elementos básicos en la comunicación que pueden servir para lograr un mayor alcance en los mensajes, de manera que contribuyan al logro de los objetivos del proyecto.
AdaptHabana beneficiará a más de 700 000 habitantes de las comunidades de la zona costera de la capital cubana, que permitirá identificar los riesgos y vulnerabilidades específicas de cada sector y grupo poblacional para la construcción de un plan de adaptación a los retos del cambio climático, que integre las medidas de adaptación y decisiones de inversión en el proceso de planificación del desarrollo.
El proyecto Plan de adaptación de la zona costera de La Habana incidirá en las zonas desde bajos de Santa Ana, en el municipio Playa, hasta el Rincón de Guanabo, en el municipio Habana del Este, incluyendo en total a seis municipios del litoral: Playa, Plaza de la Revolución, Centro Habana, Habana Vieja, Regla, Habana del Este.
Con el lema Ruta a la adaptación al cambio climático, AdaptHabana se propone contribuir a cerrar brechas que inhiben el desarrollo de los análisis integrales de riesgos y vulnerabilidad al cambio climático, así como la formulación de soluciones proactivas viables que pueden integrarse de manera coherente en los planes de desarrollo existentes.
A partir de las acciones para cumplir estos objetivos, los habitantes de esas áreas , los grupos en situación de vulnerabilidad, las mujeres, decisores del Gobierno de La Habana y los seis municipios costeros y los sectores prioritarios a nivel provincial y municipal participantes, contarían con un entorno favorable para eliminar las barreras existentes y promover la planificación de la adaptación.
Con 47 kilómetros de longitud, el 37 por ciento de la población de la principal ciudad de Cuba vive cerca del mar, cultivando su patrimonio natural, estético, cultural, social y económico para el desarrollo sostenible tanto de La Habana como de Cuba. La zona es particularmente vulnerable al aumento de nivel del mar y los fenómenos meteorológicos extremos.
La iniciativa del Plan de Adaptación cuenta con el apoyo del Fondo Verde del Clima (GCF, por sus siglas en inglés), es implementada por el Programa de Naciones Unidas para el desarrollo (PNUD) en Cuba en alianza con la Agencia de Medio Ambiente (AMA) del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma).